"Sí, lo leyeron bien, no estamos hablando de los terrenos de las anchas Castillas, ni tampoco de los montes inmensos de los Picos de Europa, hablamos del pequeño macizo de La Picota, enclavado entre los pueblos de Boo, Mortera y Liencres (todos dentro del ámbito municipal de Piélagos), pueblos que hace 20 años tenían una población de 700 personas aproximadamente y que en la actualidad ronda los 9.000 habitantes; pequeño monte en extensión pero grande en cultura y utilizado mayoritariamente por excursionistas para el disfrute de sus impresionantes vistas.
A alguien se le ha ocurrido la feliz idea de declararlo coto de caza y este domingo hemos sido desgraciadamente testigos de cómo se convertía en un lugar peligroso para el paseo por las sendas que el Ayuntamiento de Piélagos abrió para el disfrute del mismo. Encima, como no hay nada que cazar, se realiza una suelta de ejemplares para el disfrute del gatillo fácil. Vaya esta carta no como una prohibición al 'arte' de la caza, sino como una advertencia de sentido común a quien dio la firma para dicho permiso.
¿Qué espera el Ayuntamiento o Ganadería, o quién dio el permiso, para evitar una tragedia? ¿Seremos parte de algún accidente (eso sí, legalmente) para que los que nos dirigen nos protejan a la vez? No creo que La Picota sea lugar de tiros por lo visitado que es, por la gente que vive allá, por las sendas que circulan en su interior y por sentido común."